Comienza nuestro recorrido por la provincia con la compañía de una guía local de nombre María,
más nuestra acompañante Victoria y chofer Jesús. María se acopló al grupo
estupendamente y nos fue enumerando los parajes por los que pasábamos con una
claridad que nos cautivo y todos nos mantuvimos atentos a sus explicaciones.
Siempre que salíamos de Punta Umbría teníamos que pasar por
los largos puentes de las marismas del Odiel.
De la gastronomía de Huelva lo más conocido en su costa son
las gambas, chocos y coquinas; de sus tierras el fresón y los vinos con D.O.
Condado de Huelva; de su sierra los jamones y embutidos.
Cruzamos la zona del Condado de Huelva con una agricultura
floreciente de campos inmensos y amarillos del girasol; plantaciones de
frambuesas y arándanos; las plantaciones del
fresón ya recolectadas y arrancándoles para una nueva cosecha de melón y
sandia.
Pasamos por Moguer, lugar de nacimiento del poeta Juan Ramón
Jiménez. En nuestro camino también nos encontramos con la fábrica de celulosa,
cerrada de hace un año; esta fabrica fue polémica dos veces, cuando la montaron
por que los montes cercanos los repoblaron de eucaliptos que no son autóctonos
y ahora porque al cerrarla cientos de obreros se fueron al paro y son muchas
las familias que se quedaron sin su sustento.
San Juan del Puerto; curioso nombre porque no está cerca del
mar pero antaño si que tuvo puerto, es donde llegaban las barcazas para
trasportar los materiales de las minas de Rio tinto. De este pueblo son típicas
las capeas por las calles del pueblo, protegidas por empalizadas; las capeas de
San Juan Bautista patrono de este pueblo.
Por esta zona ya en el siglo XV era reconocido su vino y ya
se comenzó a exportar; en el siglo XIX la filoxera acabó con las viñas y les
costó mucho el remontar de nuevo. Ahora se elabora un vino muy preciado que
llaman de “naranja” con D.O. 2011, se hace con uva “zalema” que es la que
resistió la filoxera.
Almonte mantiene la tradición de la “saca de las yeguas”; el
26 de junio recorren las marismas para recoger las yeguas marismeñas que son
autóctonas, las nuevas las marcan, las bendicen y sueltan de nuevo.
El Acebron es un palacio enclavado en el centro del parque
de Doñana, parque natural y nacional junto a las marismas de Doñana. Este parque
en el siglo XIII era el cazadero real de Castilla; Doña Paca Espinosa Fondevilla
era propietaria del Palacio del Coto donde se alojaba el rey Alfonso XIII en
sus cacerías; el hermano de esta, Don Luis Espinosa Fondevilla que era excéntrico
y se siente muy celos de la amistad de su hermana y el privilegio de recibir
tan ilustres invitados manda construir un palacio, del Acebron (asno salvaje),
para dar sus fiestas privadas en la intimidad de esos pinares; se arruina
varias veces y cuando decide venderlo antes decapita un águila que corona el
edificio porque tenía la certeza que ese águila vigilaba sus posesiones y no
quería que siguiera vigilante en manos de unos extraños.
Este palacio lo compra celulosa y a esta se lo compra ICONA para
su conservación. El palacio está oculto en la espesura del parque y se accede a
sus jardines por una verja y puerta que son copia de Versalles, hay en los
jardines unos árboles grandes y preciosos llamados árbol de fuego por el color
de sus racimos de flores; es de la familia del eucalipto.
Al palacio se accede por una gran escalinata y en su parte
baja se conservan parte de los muebles y cuadros originales del fundador, hay
una escalinata de artesonado de madera y mármol rojo preciosa que da acceso a
la planta donde hay una exposición de aperos y costumbres de la zona y la
azotea es un gran mirador para contemplar el entorno que rodea al palacio. Hay una
pequeña capilla dedicada a la Virgen del Rocío.
Hasta una nueva entrada, saludos.
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