Querid@s
amig@s;
Paso a
relataros mi viaje a esta bonita ciudad de Antequera, el recorrido fue
interesante por los parajes que recorrimos y la amabilidad de nuestra guía Mónica
que nos relató con pelos y señales todo cuanto estaba al alcance de nuestra
vista y que el chofer Paco participaba aminorando la marcha para que disfrutásemos
del trayecto. Nos llamó la atención el cementerio de Casa Bermejo, con todas sus tumbas encaladas y blancas como
si de pequeñas casitas se tratara. La luz es el lema que resalta en toda
Andalucía por la blancura inmaculada de sus casas y sus puertas abiertas
invitando al visitante y luciendo sus cancelas alicatadas con vistosos
azulejos, ya sean en la costa o en la serranía sus pueblos son de dos colores:
el blanco de sus paredes y el rojo de sus tejados.
La ciudad de
Antequera está en el centro neurálgico de Andalucía, es considerada Km. 0; por
su situación tiene tres estaciones de tren, una es el AVE. Tiene 50 iglesias de
las que en estos momentos tan solo 35 son usadas para el culto por la escasez
de sacerdotes. Su riqueza o fábricas son mayoritariamente de dulces, mantecados
y aceites; tiene una gran extensión de terreno fértil, agrícola y olivos.
Como ya dije está situada en el
principal cruce de caminos de Andalucía y ello le valió ser considerada como
paso obligado de viajeros en todas las épocas de la historia dejando sus
vestigios las diferentes culturas, comenzando por los dólmenes, alcazaba, casonas
señoriales, etc.
Antequera cuenta con una
interesante historia arqueológica aproximada al 4º milenio antes de Cristo; los
dólmenes de Antequera son únicos, espectaculares y en perfecta conservación. El
dolmen de Menga se levantó hace unos seis mil años, se cree que es un monumento
o templo de ofrendas y sacrificios por que hace poco se localizó en su sala
circular un pozo con abundantes restos animales; está situada su entrada de tal
forma que el 21 de junio el sol lo ilumina hasta el fondo. Sus paredes y su
techo son enormes moles de piedra, que se calculan en 180 toneladas. Yo leí
unos libros de “La viajera” y me sentí como ella, procuré no pegarme a las
rocas por si me absorbían a otra época jajajaja.
El dolmen de Viera es de
similares características pero su pasillo es más estrecho y terminando en un
espacio o cámara funeraria de lo que se deduce que este es dedicado a
enterramientos. Hay otro dolmen, del
Romeral y al que no pudimos ir por quedar distante de nuestro itinerario.
Al lado de la alcazaba se ven las
termas romanas que por esa época llamaron Antikaria a Antequera.
No se puede hablar de Antequera
sin mencionar la peña de los enamorados sobre la que hay una leyenda de
enamorados y como no podía ser de otra forma eran una mora y un cristiano que
deciden morir juntos despeñándose de ella antes que separarse; como se puede
apreciar es la perfecta silueta de la cabeza de un hombre, un capricho de la
naturaleza.
Esta ciudad
fue conquistada a los moros por Fernando de Trastámara al que luego se le llamó
“de Antequera” y de ahí parte el dicho “cuando salga el sol por Antequera”
porque dijo a sus tropas que a la salida del sol estar por Antequera; ahora
esta frase se usa cuando se hace algo a pesar de su prohibición o desoyendo los
consejos.
En la
alcazaba destaca la torre del homenaje o torre del papa bellotas, se le da ese
nombre porque se costeo su restauración con lo recaudado al recoger las
bellotas de los encinares y alcornoques que la iglesia tenía el privilegio de
recolectar para atender a las necesidades de los pobres; en esta torre se
colocó coronándola la campana grande de la ciudad y el reloj.
Visitamos la colegiata de Santa María de Jesús, una
iglesia impresionante dedicada a la
Virgen del Socorro y que su camarín es de una belleza incalculable. !!!Que belleza tienen todas las vírgenes andaluzas¡¡¡
Mis querid@s amig@s, este relato continuará con mas reportajes.
Besotes.
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